La dulce espera... el embarazo
- Isabel Alanís
- 2 jun 2018
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 27 jun 2018
Los primeros tres meses la verdad fueron de mucha angustia pues no hay forma de que sepas lo que está pasando con tu bebé en ese tiempo. Claro que acudía a mis citas mensuales pero y ¿Cuando estas en casa cómo sabes que está pasando en tu vientre? Después de todo la vez anterior no tuve ningún malestar, solo me di cuenta porque fui a mi cita en la que tenía 11 semanas y al revisarlo no había frecuencia cardíaca y mi bebe era de 10 semanas. Por suerte una bellísima amiga que es enfermera tenía un doppler portátil que nos prestó y pudimos escuchar su latido desde la octava semana y de ahí cada vez que nosotros queríamos, eso me dio mucha tranquilidad, aunque todavía me angustiaba, la facilidad de poder escuchar su corazón en cualquier momento me regresaba la paz instantáneamente. Y tuvimos muchísimas alegrías al escuchar su latidos era como su nombre lo dice “Melodía de vida”.
Comencé a sentir nauseas matutinas y a tener vómitos el día que cumplimos las 9 semanas y de ahí a casi hasta el final del embarazo solo presentaba esos síntomas los días sábado que era cuando cumplíamos semanas, nunca me molesto, para mí era la forma en que mi bebé me decía : “Aquí estoy mami, ya cumplimos una semana más”.
Los siguientes tres meses fueron mucho más relajados, comencé a sentir sus movimientos a las 14 semanas, el paseo en auto y la música rock la activaban mucho en las mañanas camino al trabajo. El poder sentirla dentro de mí, pateando con fuerza y seguir teniendo la posibilidad de escuchar su corazón, me ayudaron a poder disfrutar al máximo esta etapa.
El último trimestre fue un poco más pesado para mí en cuando a malestares, tenía mucha dificultad para poder dormir por las noches pero todo el día tenia muchísimo sueño, me sentía muy cansada, en el último mes mis piernas y pies se hincharon muchísimo, yo decía que tenía pies de elefante. Con todo y todo yo me sentía feliz y ansiosa de conocer a mi hija.
El último mes celebramos con familiares y amigos la dulce espera en tres hermosos baby shower, uno organizado por mi madre, otro por mi suegra y el tercero por mis mejores amigas. Los disfrute muchísimo, ya les daré más detalles en otro post.
Si tuve un susto algo fuerte pero no recuerdo en qué periodo fue, me parece que en el segundo trimestre casi a finales. Presente unos cólicos algo fuertes que me hacían permanecer doblada y no me permitían caminar, lo curioso era que me daban y se me quitaban. Lo bueno es que contacte a mi ginecólogo, me receto medicamento y tuve que ausentarme dos días del trabajo, pero gracias a Dios todo siguió marchando bien.
Todo el tiempo estuve segura de que Aria Zoé nacería a las 38 semanas pero no fue así, mis ansias duraron hasta las 40 semanas y 3 días. Las últimas dos semanas las pase con contracciones, las llamadas Braxton Hicks, lo que me hacía estar más ansiosa y un poco asustada pero al final un día del mes de abril, después de una necesaria cesárea, AZ mi hermosa bebé arcoíris llegó a este mundo.

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